Este artículo discute los factores que inciden en las trayectorias educativas y laborales de mujeres que cursaron estudios secundarios técnico profesionales en la Región de La Araucanía, Chile. Se entrevistó a 12 mujeres que egresaron entre 2013 y 2017, seis de ellas de especialidades tradicionalmente femeninas y seis de sectores altamente masculinizados. La investigación nos conduce a tensionar el concepto de “elección”, pues el ingreso a esta modalidad educacional está condicionado por factores económicos y de movilidad. En la fase de selección de una especialidad se evidencian factores subjetivos que motivan a las mujeres a insertarse en áreas tradicionalmente femeninas, o bien, a desafiar los mandatos de género reproducidos en discursos docentes y familiares. Tras el término de su educación, las mujeres experimentan sexismo y acoso sexual en los espacios de práctica laboral que, en algunos casos, generan desafección hacia los oficios masculinizados. La decisión de continuar un proyecto educacional, insertarse en el mundo laboral, o compatibilizar ambos escenarios está mediada por restricciones socioeconómicas, maternidad y falta de redes de apoyo familiar. En síntesis, las variables de clase, género y procedencia geográfica se interseccionan para condicionar las trayectorias educativas y profesionales de las mujeres.