La lengua oral y la lengua escrita están en constante relación en comunidades alfabetizadas. En este artículo se aborda cómo repercute la enseñanza del discurso argumentativo oral en el desarrollo del discurso argumentativo escrito, y viceversa. Los participantes fueron alumnos de 1º curso de educación secundaria, asignados aleatoriamente a una de tres condiciones: el grupo Oral-1 recibió una intervención en lengua oral primero y en lengua escrita después; el grupo Esc-1 recibió una intervención en lengua escrita primero, y en lengua oral después, y un grupo de control, que recibió las clases habituales de Lengua y Literatura Castellana. Se realizaron evaluaciones pretest, postest-1 y postest-2 para determinar la mejora en habilidades intramodalidad e intermodalidad. Los resultados indicaron que los efectos intramodalidad de la intervención en lengua escrita fueron más contundentes que los de la intervención en lengua oral. Ambas intervenciones produjeron efectos de intermodalidad. Se concluye que la enseñanza del discurso argumentativo debe tener en cuenta las relaciones entre ambas modalidades.